Higiene Corporal

La higiene forma parte de nuestra rutina diaria ya que contribuye a nuestra salud, bienestar y comodidad. La higiene de la piel permite que ésta cumpla sus funciones con normalidad al eliminar la suciedad, mezcla de secreciones y contaminantes, ayudando también a mantener el equilibrio de la flora cutánea.

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Gel de baño sin jabón
Piel normal

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Consejos para una buena higiene personal

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Higiene de manos

El lavado frecuente de las manos puede eliminar la hidratación natural de las manos y nuestra piel puede verse afectada, volviéndose más seca, agrietada y sensible.

Para ayudar a restaurar la integridad de la piel, te recomendamos hidratar tus manos a diario y seguir estos consejos:

Lávate las manos con agua y jabón durante unos 40-60 segundos, frotando las manos entre sí Después del correcto lavado de manos, aplica crema o loción hidratante para mantener la hidratación Hidrata las manos de 2 a 3 veces al día y tras el secado de las manos.

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Higiene corporal

El baño es uno de los hábitos de higiene y cuidado para una correcta salud de la piel. Por ello, para una higiene corporal adecuada es muy importante tener en cuenta algunos aspectos como: la temperatura, duración del baño, jabones empleados y el secado posterior.

Es recomendable limitar la duración de la ducha a cinco minutos.

La temperatura del agua ideal debe ser alrededor de los 30 ºC o un poco menos (es decir, templada).

Durante el baño, nuestra piel puede llegar a perder hasta el 25% de su hidratación. Es por ello que utilizar un gel de baño o jabón con pH fisiológico que respete el manto lipídico de la piel es fundamental

Finalmente el secado es muy importante ya que no es aconsejable mantener humedad en la piel, sin embargo, no se recomienda frotar con fuerza nuestra piel. Es importante secar con cuidado ciertas zonas como las axilas, pies (sobre todo entre los dedos), e ingles.