Atopia

¿Qué es la piel atópica?

La piel atópica es una piel seca o muy seca, muy sensible y reactiva . Se asocia a personas que presentan o han presentado brotes de dermatitis atopica que es una enfermedad  inflamatoria de la piel que presenta enrojecimiento y sequedad, lo que comporta un posterior círculo vicioso de picor y rascado. La dermatitis atópica tiende a cursar en períodos de brote (cuando está en su máxima expresión) y de remisión. Es crónica y no contagiosa. 

Los brotes de dermatitis atópica suelen provocar un picor severo que puede ocasionar incomodidad en el día a día de quien la sufre. 

La mayoría de los casos aparecen durante el primer año de vida, pero en la edad adulta también puede manifestarse en algunos casos concretos. 

¿Cómo se puede curar la dermatitis atópica?

Para tratar la dermatitis atópica debes acudir a tu dermatólogo, quien determinará el tratamiento más adecuado según la fase en que se encuentre. 

Además, los hábitos diarios también son importantes para mitigar los signos de la piel atópica: 

Durante el baño - es muy recomendable utilizar geles de baño específicos para la piel atópica para evitar agravar la sequedad. Intenta no alargar mucho el momento del baño y házlo con agua tibia en lugar de caliente. Es importante, además, que evites frotar la piel con esponjas para no dañar la barrera de la piel.  

Durante el secado posterior - es crucial evitar la fricción con la toalla para no agravar la irritación. Asegúrate de secar bien cada zona del cuerpo para evitar un exceso de humedad. 

Hidrata la piel - aplicar una crema o loción hidratante específica para piel atópica ayuda a calmar los signos. 

Evita las fibras sintéticas - en su lugar elige prendas de lino o algodón, que disminuyan el riesgo de irritación de la piel. 

Utiliza un detergente suave para la ropa - que minimice el riesgo de irritación en la piel. 

Intenta evitar alérgenos del ambiente - los ácaros presentes en el polvo, alfombras y ropa de cama pueden desencadenar brotes de dermatitis atópica, así como también la exposición al humo del tabaco. 

En invierno, regula la temperatura - el frío y las calefacciones pueden empeorar los síntomas de la dermatitis atópica, ya que pueden producirse cambios en la barrera protectora de la piel. 

Cuidado con las piscinas en verano - el cloro puede aumentar la sequedad de la piel y agravar el problema. Recuerda también la importancia de usar protector solar: si bien el sol (en su justa medida) y el agua de mar ayudan a mejorar los síntomas de la piel atópica, sigue siendo fundamental protegerla de la radiación solar.  

¿Cuáles son los signos de la dermatitis atópica?

Los signos de un brote de dermatitis atópica pueden variar de una persona a otra, pero los más comunes son la sequedad extrema y el picor (sobre todo durante la noche). También pueden aparecer manchas de color rojo o marrón en las manos, los pies, los tobillos, las muñecas, el cuello, la parte superior del pecho, los párpados, la parte interna de los codos y las rodillas. En el caso de los bebés, estas manchas pueden aparecer también en el rostro y el cuero cabelludo. 

En algunos casos, la dermatitis atópica puede presentar protuberancias de un picor extremo que forman costras si se rascan, así como piel engrosada e inflamada. 

¿Qué producto puede ayudar a aliviar la dermatitis atópica?

Existen gamas de productos específicamente creados para mitigar los signos de la dermatitis atópica, que incluyen gel de ducha, crema o loción hidratante y productos coadyuvantes al tratamiento médico (en caso de que se requiera). 

Sin embargo, antes de empezar a usar productos para la piel atópica es muy importante que consultes a tu dermatólogo, quien indicará la pauta y el tratamiento adecuado a seguir en cada caso.